La orgonita es una herramienta muy poderosa para revertir la contaminación en la atmósfera, suelo y especialmente en el agua.
El agua amplifica los efectos del orgonito, con lo que se puede depositar generadores de orgón en sitios con agua contaminada.
El orgonite también tiene un efecto sobre el comportamiento de personas y ayuda a restablecer la pulsación original desbloqueando las resistencias des adaptativas propias del hombre acorazado.
Wilhelm Reich explico ampliamente la función de la pulsación vital orgástica, y los bloqueos que se generan a lo largo de los anillos musculares corporales, que impiden la circulación natural de la energía vital.
Cada persona por si misma puede comprobar los múltiples efectos benéficos del orgón en su entorno y recuerden que las observaciones subjetivas son validas, mientras sean racionales y observables por otros.
Los generadores de orgón, construidos apropiadamente son absolutamente seguros y no tienen contraindicación alguna para la persona, animal o vegetal que los lleve consigo, y los tenga a su alrededor. Haciendo en todo caso una pantalla protectora para la contaminación electromagnética de nuestros días; generada por múltiples aparatos eléctricos como son: microondas, tv, frigoríficos, teléfonos móviles, aparatos inalámbricos, antenas, parabólicas, redes wifi, inalámbricas, etc.
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